Carillas
Las carillas son láminas de cerámica que se aplican a la superficie de los dientes mediante un adhesivo especial. Las carillas pueden utilizarse para corregir pequeñas desalineaciones dentales, espacios entre los dientes, colores dentales insatisfactorios y decoloraciones locales. Las superficies visibles de los dientes adquieren así un aspecto optimizado. La cerámica transmite la luz y es del color del diente. El color y la estructura de la superficie los diseña individualmente el protésico dental.
Procedimiento
Se retira una capa fina (0,3-1,0 mm) del esmalte. A continuación se toma una impresión. La restauración provisional se hace con carillas de plástico. El dentista y el protésico dental determinan juntos el color y la estructura del diente. El protésico dental fabrica la carilla sobre un modelo hecho a partir de la impresión. Las carillas se prueban en una segunda sesión. Después se limpian los dientes y, si es posible, se secan con un dique de goma. A continuación se graban y se recubren con un adhesivo. Las carillas se tratan con un gel especial de grabado cerámico (ácido fluorhídrico) y se silanizan. Se fijan con un adhesivo a base de composite.